El desarrollo de la agricultura tuvo numerosas consecuencias, algunas de
ellas de gran trascendencia para la historia de la humanidad. Una de las más
importantes fue el incremento de las concentraciones humanas que se organizaron
y llegaron a formar estados Aun así, siguieron existiendo pueblos nómadas, como
los aborígenes de Australia o los boiximanos del sur de África, que no
utilizaron la agricultura, y si lo hicieron, fue en una época más reciente.